Estación

Shun / Yaoi / TVXQ / YooSu / One-Short
Resumen:
En el parque por la noche camino a casa, las gotas de lluvia caían por montones. Y pensé en ti. Una gota ha tocado mis manos, es como si hubiera sido tocado por ti... silenciosamente.


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Sonreí agradecido al hombre de la boletería, él amablemente me extendía el boleto para el tren que tomaría en una justa hora. Tanta tristeza me daba, pero era algo que realmente necesitaba. Tome asiento en una banca mientras esperaba el momento, llovía fuertemente, algo propio de la estación… algo tan propio de momentos como este; deje a un lado el paraguas gris que compre al principio del mes, ese día recuerdo que Chagmin estaba muy feliz por que habías arreglado su teclado, sonreía como el niño que es verdaderamente. Yo sabia la gran persona que eras, lo magnifico que llegabas a ser si te lo proponías, ese cariño tan grande que entregabas a tus amigos, ese cariño que eternamente soñaría con que pudieras profesarme a mi sin una fachada de amigos, que me amaras como yo te amo incluso en este momento.

Sonreí tristemente mirando las gotas caer una tras otra componiendo una melodía, era realmente triste pero hermosa. ¿Será que estoy realmente loco por esperar aun por ti? Creo que si, miro frecuentemente la entrada al anden, pienso inconciente en fases que podría decirte, en como me abrazas pidiéndome disculpas, en como callarte y decirte que no importa por que lo que formaremos desde ahora será mas fuerte.

-Muy lindo para ser verdad- de mi bolsillo saque una barra de chocolate que Changmin me dio al salir, el era el único que sabia por todo lo que e pasado, el incluso me ayudo a convencer a los manager de permitirme un descanso, un par de meses difícilmente conseguidos, pero la insistencia del mas joven integrante del grupo lo consiguió… me hubiera gustado tener la fuerza que el poseía, quizás… no estaría escapando. Simplemente cargaría en mis sueños el recuerdo de la perfecta convivencia, cuando podías sonreírme sin sentirte incomodo, cuando podía abrazarte mientras pensabas en que era poco importante… pero para mi era un contacto con aquella sensación que me llenaba… simplemente no pude evitar enamorarme de ti.

[ X x X ]

Caminaba durante la noche por el parque camino a casa, la verdad era que aquel paseo nocturno era para despejar mi mente de sus recientes tormentos. El cielo abrumado me hacia compañía, una a una gotas comenzaron a caer y pensé en el. Infantiles eran mis sueños donde sin importar cuan frió fuera el día siempre sentiría calor entre sus brazos. Apresure el paso hasta llegar al apartamento, entre y me recibió un calido ambiente donde la mesa estaba preparada para la cena. Había exactamente cinco puestos, mi corazón se enterneció puesto que me incluyeron, sin saber si llegaría a tiempo pensaron en mí, tuve la pequeña ilusión de que lo hubieras propuesto tú.

-Está listo- Jaejoong llamo a comer mientras salía de la cocina y me vio- estas mojado ¿Cuándo comenzó a llover?

-Hace un par de minutos, me pillo en el parque- miro por la ventana y luego me miro reprochándome- ¿Qué?

-¿Piensas enfermarte y hacernos quedar sin trabajo? Ve a cambiarte de ropa, preparare algo caliente espacialmente para ti- le sonreí.

-Xiah Junsu, si no estas en cinco minutos seco y con tus defensas reforzadas te daré de baja- Yunho estaba a mi espalda avanzando hacia la mesa, hablaba como el líder que es. Changmin salio luego de la habitación donde estaba su computadora, me hizo un puchero y siguió de largo sentándose y recibiendo su comida sin decir nada mas, así era el… demasiado extraño. Fui a la habitación sin esperar nada mas, me cambie de ropa y seque mi cabello deprisa, no quería quedar sin mi comida. Salí con la típica sonrisa que me caracterizaba tomando lugar entre Yoochun y Jaejoong.

-Junsu… -mire a Micky rápidamente, el tenia una mirada penetrante sobre mi, podía descubrir todo un mundo nuevo perdiéndome en su mirada- me comí tu arroz –sin mas volvió la vista al frente.
-¿Eh? ¿Por qué? – le reproche mirando a Hero que solo levanto los hombros- Yoochun, tengo hambre ¿sabias?

-Es tu culpa por ser tan desconsiderado de salir sin avisar con este clima y… podría haberte pasado cualquier cosa ¿sabias? – me quede callado y el tiempo se detuvo. Parecía perfecto, Yoochun preocupado por mi, expresando que sentía aquel sentimiento de protección. Sonreí como idiota y comí lo que aun quedaba en mi puesto, la cena fue tranquila, con más de algún alimento volando por el aire para dar a parar en el rostro o cabello de alguno de los chicos, y solo podía reír… por que una simple expresión de su rostro iluminaba mi día. La cena concluyo y ayude a Jae con los platos, me quede un momento con el hasta que el trabajo fue hecho. Me senté en el amplio sillón de la sala y tome el control del videojuego.

-No te quedes hasta tarde Junsu… ya sabes lo que pasa en la mañana- Yunho arrastraba los pies camino a la habitación mientras hablaba, yo creo que lo hacia mecánicamente, siempre con las mismas indicaciones, ya chocando con Chagmin lo miro profundamente- no uses la computadora, mañana yo mismo borrare todos esos videos -no pude evitar reír desde donde estaba, Max lo miro sin cambiar la expresión y se sentó a mi lado viéndome jugar.

-Deberías decírselo- con ese simple comentario me hizo fallar en mi juego, baje la mirada sabiendo a lo que se refería- quien sabe si no estarán perdiendo valioso tiempo, quizá ambos quieran lo mismo.

-¿Entonces por que actúa conmigo como lo hace con todos?, el no siente nada… tengo que aceptarlo- deje el juego a un lado y apoye mi cabeza en el respaldo del sillón.

-Tu puedes aceptarlo y olvidarlo, pero yo no. ¿Qué crees? No estoy en mi propia dimensión como se piensa, eres demasiado importante como para dejarte así, permítete decirlo todo y dejar que mi joven alma descanse de tanto drama- hizo un gesto melodramático, no evite abrazarlo con una sonrisa.

-Changmin, ¿Dónde esta mi…? – Micky entro a la sala viéndonos con rostro neutral, para luego sonreír – disculpen- se fue sonriéndonos picaramente. Se rompió mi sonrisa, Max me miraba culpable.

-No importa- me separe de Max aguantando las ganas de llorar, no quería ser un niño, no quería perderme en el vació de el sentimiento que comenzaba a alojarse en mi- ¿ya ves? A el tampoco le importa… - Fui hasta la habitación y me metí en mi cama sin mirar a nadie en la habitación, poco después entro Max y se acerco a mi cama para acariciarme el cabello -¿Qué pasa? –negó con la cabeza sonriéndome.

-Buenas noches – simplemente fue a su cama que estaba en medio de la de Jaejoong y Micky, el ultimo lo miraba con una sonrisa que Max devolvió. Era realmente extraño…

Una nueva mañana donde desperté producto de un peluche dar contra mi rostro, Yunho desde su cama me había lanzado uno de ellos. Me senté y arrope tallando mis ojos, cuando enfoque bien note que ya todos estaban despiertos pero aun metidos en su cama.

-¿Qué pasa?- no me gustaba ser el ultimo en enterarme de las cosas pero… era inevitable – ¿Por que hace tanto frío?

-Llamo el manager, la lluvia aumento y el viento es demasiado fuerte. Dijo que nos quedáramos en casa hoy… pero… no quiero salir de mi cama- Hero se arropo aun más y el resto asintió, yo sonreí entendiendo la situación a la perfección. Mire a Changmin que estaba muy cómodo leyendo un libro.

-No es justo, tu cama esta bajo la calefacción – el quito la vista de su lectura y me indico que me acercara, obediente me acerque y me permitió meterme a su lado bajo las mantas. El resto de los chicos comenzó a soltar exclamaciones contra Max y no entendí muy bien como todos terminamos en su cama, comenzó una conversación de la cual perdí el hilo cuando Hero rebatía condiciones químicas. Di un suspiro dejando caer mi cuerpo hacia atrás, me sentí extrañado al topar mi espalda con el pecho de Yoochun, mire por sobre mi hombro como el sostenía mi cuerpo. Llego momento en que no se dio abasto a tanta pereza y fui obligado por nuestro líder a dejar la calida cama de Changmin, no había mucho que hacer… así fue como estaba por tomar lugar frente a mi teclado cuando Max me lo impidió.

-¿Qué?- hice un puchero mientras me arrastraba a la sala, allí me entrego un abrigo.

-Iras conmigo a la tienda – estaba por protestar cuando me callo con una de esas miradas suplicantes.

-Pero… no se manejar- Me abrigue con bufanda y unos mitones

-Yo tampoco -¿Qué? No tenia pensado caminar, por lo que notablemente se lo demostré dando un paso atrás- por eso Yoochun nos llevara, ya sabes… tiene auto- guarde silencio hasta llegar al estacionamiento del edificio, Micky estaba en el auto. Max me empujo al asiento delantero mientras el se sentaba solo en la parte de atrás, llevo una manta consigo. Fuimos a una tienda a unas calles, Max insistió en ir el solo, se veía muy gracioso entrando a la tienda con la manda aun encima. Mire a Yoochun que tenia la vista perdida en la lluvia.

-Yoochun, no se que pienses pero… entre Changmin y yo no hay nada, solo amistad- Micky suspiro y me miro sonriendo, luego asintió sin prestarme atención verdaderamente.

-Lo se, Changmin me lo dijo- me sentí contento de que Micky supiera que no tenia ojos para nadie mas, aun que… por una ves quería dejar de sentirme escondido.

-Eso es por que a mi ya me… gusta alguien desde hace mucho- ahora tenia su completa atención, se acomodo en su asiento inclinando el rostro- no tengo idea de cómo ocurrió, el… creo que era imposible que no me enamorara- espere su reacción un momento, no se veía afectado por revelar la condición de que me gustara otro hombre- me enamore de mi compañero, me di cuenta cuando lo miraba en los ensayos, cuando en casa me sentía volar al recibir su completa atención… Changmin se dio cuenta y a estado alentándome a decírselo – me vi obligado a desviar la mirada al frente cuando Yoochun me miro dolido, sabia que ese era un rechazo pero… necesitaba decirlo, quería cortar mis alas, necesitaba de cualquier forma volver a la realidad - ¿no es extraño? De la forma en que llego, se alojo en mi vida instantáneamente, no tuve tiempo de reclamar o tratar de evitarlo… aun que ya no quiero evitarlo, se que no es posible crear un cuento de hadas pero… tan solo quiero dejar de sentirme ahogado. Realmente quiero decirlo…- solté un sollozo y oculte mi rostro entre mis manos, la mano de Yoochun acaricio mi espalda dándome consuelo – perdóname Yoochun, pero… creo que te amo – deje de sentir la caricia de su mano, entendí que había arruinado un proyecto, una amistad. Seque mis lagrimas y sonreí amargamente – realmente no importa ¿verdad…? – abrí la puerta y baje del auto, choque con Max que interrogante trato de detenerme, pero solo quería correr, huir de ahí…

-¡Junsu, espera! – Corrí lo más que pude, hasta que mi cuerpo exigió un descanso, me senté en una vereda respirando dificultosamente. Mire tratando de saber donde estaba, casualmente no estaba muy lejos de la casa de Eunhyuk. Camine bajo la lluvia por lo menos una hora, no estoy seguro, al llegar dude en tocar puesto que no quería incomodar mas, por lo mismo di media vuelta siendo presa inmediatamente de unos brazos. Hyukkie rodeaba mi cuerpo con cariño, logre ver más atrás a Leeteuk y Donghae, tal ves volvían del programa radial.

-Junsu… ¿quieres un té?- me separo un poco de se y asentí sin mirarlo, froto mis brazos y me reclamo- te cambiaras ropa… con lo debilucho que eres te enfermaras en un par de minutos – le sonreí con un poco de dificultad, así entramos a su departamento, allí estaban algunos de sus compañeros, ellos graciosamente me saludaron… pero ninguno pregunto el por que estaba ahí ¿tan notorio era que estaba rompiéndome en pedazos?

-Hyung, ¿tienes hambre? – Uno de los chicos, Sungmin me hablo desde la cocina, me invito a sentarme y me sirvió una comida exquisita. Pase la noche en ese departamento, según supe los KRY estaban de gira por lo que use la cama de alguno de ellos. No dormí bien, en ocasiones me atormentaba la idea de que ahora Yoochun estuviera enojado, tal vez le reclamaría a Chagmin. Sentí un malestar en el estomago, Max había sido el único que me sostuvo durante mucho tiempo, y yo… no pensé en el.

-¡Junsu!... Delfín dormilón, vamos de pie- desperté de un salto al sentir como Hyukkie me destapaba completamente, me dio mucho frió y trate de cubrirme nuevamente pero el no me dejaba- ¡Hey!, ya es la hora de que trabajes y mantengas a tu familia. Iras con nosotros a la compañía ¿ok? – gruñí, por unos minutos mi vida había dado un giro. Al meterme al baño pensé como seria todo si hubiera sido miembro de Super Junior, estaría con mi amigo, de igual manera habría conocido a los chicos y tal vez también serian mis amigos ¿me habría enamorado de Micky también? Si, creo que hubiera sido inevitable, pero también menos tormentoso. Camino a la compañía trate de mostrarme contento, los componentes del grupo eran muy inquietos y sobre todo graciosos, se reían por todo y me contagiaban, al llegar a la compañía me despedí de ellos y agradecí el inmenso favor que me habían hecho al alojarme en su casa.

-Volviste… -Al voltearme Max estaba allí, sosteniendo un abrigo – estaba por salir a buscarte, todos preguntan por ti ¿Dónde estabas? –le sonreí y juntos fuimos a una sala vacía.

-me quede en la casa de Hyukkie –Max asintió y estaba por decirme algo pero se lo impedí- quiero hablar con el manager, pediré un tiempo…

[ X x X ]

Ya era momento, el tren detenía su paso permitiendo a la gente subir. Abrí mi paraguas y me acerque a el, veía a la gente entrar, pasar a mi alrededor pero había algo que me impedía hacerlo. Quede hasta el final y el silbato que anunciaba la pronta partida me altero, era mi decisión irme, y eso haría. Un calido aroma me tomo por sorpresa, solté el paraguas que dio contra el piso, vi el tren partir y con el mis esperanzas de olvidarte. Cerré los ojos fuertemente, quería escapar de las ilusiones.

-Ni siquiera… me esperaste- la irregularidad de aquella vos me indico que había hecho un gran esfuerzo en llegar. Abrí mis ojos lleno de sorpresa, allí estabas, abrazándome con fuerza sin permitir que me apartara. Me dio felicidad verte allí, pero una pena indescriptible el recordar que solo era para despedirte, yo esperaría el próximo tren – Ni siquiera me permitiste responderte – tomaste mi rostro entre tus manos que estaba frías, note tu cabello mojado y lo pálido que te encontrabas, solo llevabas encima una camisa que nada te protegía del crudo invierno -Estaba muy enojado, de verdad, le grite a Max exigiendo una explicación, discutimos por demasiado tiempo… finalmente termino por decírmelo todo. Junsu, no te marches.

-¿Por qué? – mi vos sonaba lastimera, me faltaban energías. Quería que los trazos que formaban el cuento de hadas se volvieran a dibujar, miraba tus ojos y permitía que las gotas de lluvia desaparecieran.

-Por que te quiero mucho, no me dejes – acerco sus labios a los míos dándome un suave rose, significo ganarme todo un paraíso de sensaciones. No quería que terminara jamás - …yo de verdad estoy seguro que te amo.